En el evento Global Saké "Máquinas que nos hacen más humanos", Gabriel Fairman organizó un debate reflexivo con Luciano Arruda y Wada’a Fahel. Juntos, exploraron las formas en que la IA y la Automatización están transformando nuestro trabajo, creatividad y sentido de autoestima, mientras plantean una pregunta importante: ¿Puede la tecnología ayudarnos a abrazar lo que nos hace humanos?
Explorando la humanidad a través de la tecnología
Gabriel Fairman, el anfitrión, preparó el escenario al abordar una preocupación común sobre el papel de la tecnología en nuestras vidas.
"Históricamente, hemos visto una clara dicotomía entre el humano y la máquina. Pero, ¿qué pasaría si la tecnología pudiera realmente acentuar lo que nos hace humanos? Gabriel explicó.
Hizo hincapié en la importancia de comprender este cambio, ya que repercute directamente en los medios de vida y el sentido de propósito de las personas.
Un proyecto para empoderar a las madres solteras
Luciano Arruda compartió una iniciativa innovadora que combina la tecnología de IA con el impacto social.
“Lanzamos un programa en Japón dirigido a capacitar a madres solteras en IA y Automatización. Estas mujeres están aprendiendo nuevas habilidades y encontrando oportunidades que nunca creyeron posibles. Luciano reveló.
Claves destacadas del programa:
- Desarrollo de habilidades: Enseñanza de programación y Automatización.
- Empoderamiento: Ayudar a los participantes a recuperar la confianza y la independencia económica.
- colaboración: Asociándose con organizaciones locales para expandir el alcance.
Luciano destacó los primeros éxitos del programa, en los que los participantes consiguieron papeles como lingüistas y programadores.
"A través de la IA, no solo están obteniendo ingresos, sino que se están reconectando con su autoestima", agregó Gabriel, destacando el impacto humano más profundo de tales iniciativas.
Breaking Free with AI
Wada'a Fahel aportó una nueva perspectiva sobre cómo la IA libera a los profesionales de las tareas mundanas.
"Con la IA, los profesionales finalmente se están liberando de las actividades repetitivas que sofocan la creatividad y el crecimiento. Nos está ayudando a centrarnos en el liderazgo intelectual y la resolución innovadora de problemas. Wada’a explicó.
Compartió un ejemplo inspirador de su tiempo en Harley-Davidson:
- En lugar de la contratación tradicional, aprovecharon su base de clientes leales.
- Los entusiastas de las motocicletas se convirtieron en parte de un equipo global de redacción, combinando pasión con narración.
"El resultado fue un éxito innovador. Involucramos talento no aprovechado, mezclando lealtad a la marca con contenido creativo de alta calidad. dijo Wada'a.
Equilibrar el miedo y la oportunidad
Si bien la IA abre puertas, también genera temores de pérdida de empleo.
Wada'a reconoció estas preocupaciones:
"Hay un frenesí en torno a las ganancias rápidas y la reducción de costos, pero esta tormenta pasará. Encontraremos equilibrio y claridad sobre los roles de la IA y los humanos.
La solución, sugirió, está en el liderazgo.
"La forma en que los líderes implementan la tecnología determina su impacto en las personas. Se trata de tomar decisiones informadas y empáticas", añadió.

Clave Takeaways
Esta discusión reveló una verdad central: la tecnología no es inherentemente buena o mala, depende de cómo la usemos.
- La IA puede mejorar nuestra humanidad al liberarnos para un trabajo significativo y creativo.
- Programas como el de Luciano muestran el potencial para el bien social a través de la innovación tecnológica.
- El liderazgo es fundamental para garantizar que la IA sirva a las personas, no que las reemplace.
Como concluyó Gabriel:
"El futuro no se trata de elegir entre las máquinas o la humanidad. Se trata de usar máquinas para hacernos más humanos.”
Al adoptar la IA de manera reflexiva, podemos crear un mundo en el que la tecnología amplifique lo mejor de lo que significa ser humano.