La inteligencia artificial (IA) está cambiando el mundo, y el sector de la traducción no es una excepción.
En una discusión reciente, el CEO de Bureau Works, Gabriel Fairman, comparó la tecnología de traducción de IA con el sistema Hawkeye utilizado en el tenis.
A primera vista, la conexión puede no ser obvia, pero las similitudes son más profundas de lo que piensas.
El auge de la tecnología en ambos mundos
A principios de la década de 2000, el tenis introdujo la tecnología Hawkeye para determinar si una pelota estaba dentro o fuera con extrema precisión. Inicialmente, fue recibido con escepticismo, y los jueces de línea humanos siguieron siendo los principales tomadores de decisiones.
Sin embargo, con el tiempo, Hawkeye ganó una aceptación generalizada, reemplazando el juicio humano en muchos torneos de alto perfil, como el Abierto de Australia.
De manera similar, la Traducción automática ha estado evolucionando desde principios de la década de 2000.
Aunque ha mejorado mucho, no ha reemplazado completamente a los traductores humanos.
Muchos temen que la IA se haga cargo de sus trabajos, al igual que los jueces de línea en el tenis temían la obsolescencia.
Sin embargo, al igual que en el tenis, la IA en la traducción sirve para soporte de los esfuerzos humanos, no para eliminarlos.
"La tecnología gobierna solo las llamadas de línea en el tenis, no todo el juego. Lo mismo ocurre con la IA en la traducción; ayuda, pero no reemplaza la experiencia humana". - Gabriel Fairman
Comportamiento cambiante e impacto en la industria
Uno de los paralelismos más interesantes entre Ojo de Halcón y la traducción IA es el cambio en el comportamiento que provocan. En el tenis, los jugadores solían desafiar las decisiones con frecuencia, confiando en la falibilidad humana.
Ahora, con Hawkeye, confían en el sistema y se centran más en su juego.
En la traducción, las herramientas de IA como la Traducción automática y el procesamiento del lenguaje natural (NLP) han permitido a los profesionales cambiar su enfoque de la traducción manual palabra por palabra a aspectos más estratégicos como la localización y el control de calidad.
Como señala Fairman, la tecnología mejora la eficiencia, pero aún requiere supervisión humana.
Cambios clave en el comportamiento:
- Tenis: Los jugadores confían en el sistema y se centran más en la jugabilidad.
- Traducción: Los profesionales dependen de la IA para la eficiencia pero aseguran la calidad mediante la intervención humana.

Los desafíos de la adopción de la IA
A pesar de sus beneficios, la adopción de la IA tanto en el tenis como en la traducción no ha estado exenta de desafíos.
La resistencia proviene de las preocupaciones sobre la pérdida de empleos, los cambios culturales y la confianza en la precisión de las máquinas.
Hawkeye, por ejemplo, tardó años en ganar aceptación generalizada, y la Traducción automática está siguiendo una trayectoria similar.
"El lenguaje es profundamente personal. Al igual que el tenis tardó en adaptarse a Hawkeye, la industria de la traducción todavía se está adaptando a la IA." - Gabriel Fairman
Un desafío significativo en ambas industrias es la pérdida de oportunidades a nivel de entrada.
En el tenis, los jóvenes jueces de línea solían abrirse camino hasta convertirse en árbitros.
Ahora, ese camino está desapareciendo.
Del mismo modo, en el ámbito de la traducción, los profesionales junior solían adquirir experiencia a través de tareas de traducción más sencillas, pero la IA se encarga cada vez más de ellas, lo que puede limitar el crecimiento profesional.

El futuro de la IA en la traducción
Al igual que el tenis siempre necesitará jugadores humanos, la industria de la traducción siempre requerirá un toque humano.
Herramientas de IA pueden ayudar en la precisión y eficiencia, pero carecen del entendimiento cultural y la creatividad que solo los humanos pueden proporcionar.
Fairman enfatiza que la clave es ver la IA como un socio en lugar de un reemplazo.
Claves:
- La IA en la traducción, al igual que Ojo de Halcón en el tenis, mejora la precisión, pero requiere validación humana.
- La adopción de la tecnología lleva tiempo y requiere aceptación cultural.
- La atención debe centrarse en aprovechar la IA para mejorar las capacidades humanas, no en sustituirlas.
A medida que la industria de la traducción continúa evolucionando, los profesionales deben adaptarse a las nuevas realidades, adoptando la IA y preservando su experiencia humana única.